La Liga más competida del siglo ha recuperado al Barça sin jugar, a dos jornadas del final. El sorprendente empate del Real Madrid anoche en Valladolid a última hora con un gol del blanquivioleta Osorio ha devuelto a los azulgrana todas las posibilidades de llevarse el título sin tener que mirar a nadie más. Para ello, necesitará apuntarse la victoria en Elche el próximo domingo (19 h.) y luego arrebatarle el liderato al Atlético en el Camp Nou con un triunfo en lo que sería una auténtica final de la Liga. Si eso ocurre, para el Barça no será la Liga más perfecta, pero sí la más vibrante desde la del penalti fallado por Djukic en el último minuto del campeonato 1993-94.
Lo vivido anoche en el Nuevo Zorrilla no es más que la confirmación de que esta Liga es "el juego de los errores", como dijo Gerardo Martino hace ya mucho. Lo más curioso del caso es que el técnico azulgrana, que esta semana ha vivido cómo el club está preparando su sucesión en el banquillo del Camp Nou por Luis Enrique, aún puede volverse a su Argentina con el orgullo de ser campeón de Liga. El propio técnico admitió el sábado, tras el empate en el último minuto en el Barça-Getafe, que la Liga era ya una quimera. Jugadores tan emblemáticos como Xavi o Busquets secundaron ese discurso de cierre oficioso de la temporada y se flagelaron por no haber hecho las cosas bien. El recuerdo de los tropiezos ante Valladolid, Granada o el mismo Getafe pesó como una losa. Pero ahora, precisamente por eso, el destino les ha deparado una ocasión histórica tras los tropiezos consecutivos del Atlético ante el Levante y del Real frente a Valencia y Valladolid. Con tanto obsequio inesperado, sería imperdonable que el Barça vuelva a fallar.
Ahora mismo, con el Atlético líder con 88 puntos, el Barça segundo con 85 y el Real Madrid tercero con 84, sólo los dos primeros dependen de sus propios resultados. La penúltima jornada, el domingo en horario unificado (19 h.), será clave para saber si el Madrid conserva alguna posibilidad de título. Si el Barça gana en Elche y el Atlético hace lo propio en su estadio ante el Málaga, los merengues dirán adiós a la Liga y al sueño del triplete a una jornada del final.
